{ Making-of } : libros – books
He decidido comenzar con este post una nueva sección en la que ir explicando cómo he tomado algunas de las fotos que voy publicando en Flickr o en mi portfolio.
¿Por qué? Pues bien, primero porque estoy convencida de que una de las mejores formas de aprender es intentar explicar a otra persona los conocimientos que vamos adquiriendo. Y en segundo lugar, porque a mi me encantan los artículos de este tipo, donde siempre puedes aprender un truco nuevo, sorprendiéndote a veces lo mucho que pueden mejorar tus fotos con pequeños detalles.
Como primer ejemplo os traigo un still-life que hice para el tema semanal {Libros}, propuesto por el grupo {Miel y Limón} en Flickr.
Como veis es una composición sencilla de libros apilados con una taza sobre ellos.
Tenía claro que el protagonista de esta composición debía ser el libro que hace unas semanas compre en una tienda de segunda mano. Me encanta el diseño de corazones, los tonos y las letras con esa grafía antigua. Para ello, coloqué el libro arriba del todo, poniendo el resto de los libros en sentido contrario para que sus colores no le quitasen protagonismo.
La taza sobre los libros fue un intento por darle un formato vertical a la foto. No me gustaba tanto el resultado dejando tanto espacio vacío en la parte superior.
La foto la tomé con luz natural y sin trípode. Aunque viendo el tiempo de exposición (1/30) igual no hubiese sido tan mala idea (..soy un poco vaga a la hora de usar el trípode). El objetivo que usé fue el 50mm f1,8 de Canon.
Como base utilicé una cómoda blanca. Tras un par de intentos decidí incluir un mantel en color crudo porque la madera lacada me daba unos brillos que no me gustaban del todo. A modo de reflector usé una panel de madera lacado en blanco que me ayudó a atenuar las sombras del lado derecho.
El procesado lo hice sobre el archivo en RAW con Lightroom, atenuando un poco más las sombras del lado derecho y subiendo un poco la saturación de los tonos verdes y naranjas del libro.
Para días otoñales y lluviosos, cuando no apetece tanto salir a patear las calles y hacer fotos, montar un mini estudio en casa es una gran opción para seguir aprendiendo y mejorando nuestra técnica, ¿no creéis?